Diálogo con el coronavirus
-Hola, tú eres el coronavirus, ¿verdad? -dije intrigado.
-El mismo. – dijo sin darle importancia.
-Oye -dije yo.
-¿Si? -dijo el.
-Llevas casi 2 meses en España y mucha gente se muere por tu culpa –ya me estaba enfadando.
-Mira el lado positivo de esto. El número de personas curadas está aumentando –dijo intentando quitarse culpabilidad.
-A ver, ¿tú quieres hacer daño a la gente? -dije intentando calmar el ambiente.
-¡No! -y rompió a llorar. –Es que la gente piensa que quiero hacerles daño y no es así. Yo solo vine a la tierra para tomar el sol y darme unas vacaciones.
-Vale, no te preocupes –dije intentando no abrazarlo. –Bueno, ya que estas aquí me podrías decir lo que hay que hacer para no contagiarse, ¿no?.
-Vale – dijo sorbiéndose la nariz. –Tenéis que lavaros las manos con agua y jabón al menos 20 segundos, evita tocarte los ojos, la nariz y la boca, ya que facilitan su transmisión, viaja solo si es imprescindible y, cuando salgas a la calle, procura ponerte guantes y mascarilla.
-Bueno, muchas gracias -le dije agradecido. -¿Te sientes mejor?
-Sí, y gracias a todas las personas que siguen las recomendaciones sanitarias -dijo.
-Por cierto, ¿quién es el mas vulnerable a ti? -pregunté intrigado.
-Las personas mayores. –dijo triste.
-Muchísimas gracias – dije, –me tengo que ir a avisar a mi abuela.
-¡Chao! - dijo.
-¡Adiós! ¡Ya nos veremos! -dije yo.
Xavi Meizoso
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